El tratamiento de los ejes transversales ha de ser interdisciplinar, quiere decir que, distintas materias, asignaturas y áreas pueden colaborar en el desarrollo de la educación para la sexualidad, el cuidado del medio ambiente, la prevención del consumo de sustancias, el proyecto de vida y la democracia desde distintos ángulos y perspectivas. Y quiere decir también que existen aspectos de estos ejes transversales que no se abordan en los programas escolares pero que conviene desarrollar para alcanzar una personalidad equilibrada. Por otro lado, la implantación de los proyectos y/o ejes transversales, favorece el avance de nuestro modelo educativo participativo y abre campos atractivos para que los padres y madres de familia, a través de actividades de apoyo al aula, actividades de apoyo a la institución y colaboración en las iniciativas de apertura al entorno, se impliquen más en el proceso educativo y a mejorar la calidad ya que, la participación es un indicador de calidad educativa. Con el fin de garantizar el desarrollo del proyecto educativo institucional se han trazado proyectos transversales que apunten a la formación integral de los estudiantes y al desarrollo de metas institucionales de carácter social.